En el arte (lo consideraremos así) de la cartomancia hay dos caminos de aprendizaje, los arcanos mayores y los menores. Los primeros tienen un significado más complejo y profundo, y ambos componen las barajas del Tarot. Los arcanos mayores son 22 cartas numeradas del 0 al 21, y que están ilustradas con figuras simbólicas que conectan con el inconsciente colectivo.
En muchos mazos de Tarot, estas cartas tienen un número en romano y un nombre. Aunque existen mazos que sólo tienen la imagen, los Tarots más viejos no tienen ni número ni nombre para estos arcanos.
Los nombres y numeraciones para cada carta son las que se presentan a continuación, aunque con alguna variación, la más común es el orden del VIII y el XI. El Tarot de Rider-Waite-Smith cambió el orden original y usa el VIII para La Fuerza y el XI para La Justicia, mientras que el Tarot de Marsella usa el VIII para La Justicia y el XI para La Fuerza.
- • 0 – El Loco
• I – El Mago
• II – La Papisa
• III – La Emperatriz
• IV – El Emperador
• V – El Papa
• VI – El Enamorado
• VII – El Carro
• VIII – La Justicia
• IX – El Ermitaño
• X – La Rueda de la Fortuna
• XI – La Fuerza
• XII – El Colgado
• XIII – La Muerte
• XIV – La Templanza
• XV – El Diablo
• XVI – La Torre o Casa de Dios
• XVII – La Estrella
• XVIII – La Luna
• XIX – El Sol
• XX – El Juicio
• XXI – El Mundo
Los arcanos mayores del tarot, presentan grandes similitudes con los senderos cabalísticos. Su significado adivinatorio viene de su significación esotérica, pero también tiene que ver con la percepción y la experiencia del propio cartomante, pues cada uno les acaba dando su propia interpretación.