Los colores influyen en nuestro estado de ánimo, y por tanto en la percepción del mundo que tengamos, de ahí la conocida frase de “todo depende del cristal con que se mira”.
En el Tarot los colores también tienen un significado, y representan diferentes capacidades y características de la persona que las consulta, la mayoría de las veces, o de quien representa la carta propiamente dicha, en otras.
En resumen, este es el significado de los colores en el Tarot:
El rojo es la pasión, acción, amor y deseo. En las culturas orientales este color, además de lo que ya hemos explicado, es el color de la suerte y la fortuna.
El blanco, desde la tradición judeocristiana significa pureza, inocencia, luz, así como virginidad.
El color plateado se relaciona con el empeño y tesón, también con la paz.
El amarillo, tradicionalmente, ha sido el color de la inteligencia, también el de la felicidad. Se le han atribuido poderes para mejorar la fuerza y los cambios , características que comparte con el color naranja.
El dorado, en cambio, representa la riqueza, el dinero, desde siempre ha representado a los reyes.
En cuanto al color azul, decir que está relacionado con la confianza, el equilibrio y la perdurabilidad. En los tonos, el azul oscuro, o azul marino, se le atribuye ser el inspirador del conocimiento, la fuerza, poder, lealtad, integridad y rectitud, mientras que los azules claros están más relacionados con la curación, la tranquilidad, tolerancia, altruismo y sosiego.
Los tonos de color púrpura son el color de la inspiración y la creatividad llevados hasta la trasgresión.
El negro, en cambio, refleja vida interior, misticismo, reflexión, orden, retiro, rectitud, previsión, contención .
Al contrario de lo que pueda parecer, el color gris representa a personas muy organizadas y con grandes capacidades para las relaciones con sus semejantes, sociables, comunicativas y extrovertidas.