Como ya sabrás el Tarot Celtíco puede ser utilizado por los principiantes gracias a que es muy sencillo, por el contrario el Tarot kábala es mucho más complejo y elitista. Al principio su conocimiento sólo estaba al alcance de unos pocos, afortunadamente esta situación ha cambiado y ahora es más accesible, aunque sigue su lectura, para llegar a la plenitud de ella, sólo se recomienda a tarotistas profesionales.
El Tarot kabala se basa en los conocimientos de Samael Aun Weor, y comparte numerosos rasgos del Tarot egipcio. Lo que lo hace especial es que se inclina por adivinar un futuro a largo plazo.
El término Kábala proviene de Qabalah, voz hebrea que indica suma o adición, en este medio de adivinación se toman en cuenta tres aspectos, el teórico, el reflexivo y por último el mágico. El aspecto teórico hace referencia al mundo espiritual del ser, el reflexivo indica la utilidad de diversos nombres y medios adivinatorios para alcanzar diferentes estados y la kábala mágica está muy vinculada a la meditativa.
Los partidarios del origen hebreo del Tarot, han apoyado fértiles argumentaciones en las evidentes similitudes que lo ligan a la kábala, aunque es más fácil suponer que tanto una como otro heredan del pitagorismo su simbología matemática.
Oswald Wirth defiende la disposición de los arcanos en siete ternarios y tres septenarios, lo que puede considerarse como un segundo paso en el entrenamiento para descubrir las relaciones internas entre las cartas. En este sentido hay que suprimir de la baraja a El Loco, sin numeración o con el número 0.
